miércoles, 11 de enero de 2012

Revolución cubana: un crimen según la lupa imperialista. I Parte.

No hay monopolio informativo al servicio del capitalismo, “letrado” etiquetado por el opulento marketing financiero, periodista “independiente” o más que algún otro chiflado con su alma en venta por padecer un dolarizado bocio ideológico, cuales no hagan hincapié en los supuestos “fracaso” del sistema socialista cubano y la “errabunda dirección” de la generación del centenario frente al gobierno, durante estos años de Revolución cubana.
Medios de prensa escrita, radial y televisiva, junto a los adictos de la pagada pluma con ahincada conducta a la propaganda subversiva y pura manipulación, despliegan horas y altos recursos para el sostenimiento de sus gatuperios anticubanos; sentados más en lo especulativo de un “suicidio nacional al estilo hollywoodense y nauseabundo” que en la realidad resultante del infalible empirismo de la praxis revolucionaria cubana.
Las agudas críticas se enfilan a la carencia material (tanto para el “consumismo” tecnológico como para el mejoramiento de inmuebles públicos y viviendas), de la baja producción agrícola (como la producción de azúcar, viandas u hortalizas) y la insuficiente explotación de las tierras, invadidas gran parte por el marabú, mientras se encarecen los alimentos existentes y los productos normados no alcanzan para todo el mes.

Critican la dualidad de monedas existente en el país (CUP y CUC) como la dualidad de tiendas en ambas monedas (teniéndose más existencias y variedad de productos en las TRD’s que en aquellas de moneda nacional) y se empecinan con fanatismo en comparar la moneda nacional (CUP) con el euro o el dólar que se mueve en el llamado “Primer Mundo”. Además, desaprueban a ultranza el estricto control sobre los escasos medicamentos o señalan sólo desmanes sobre el real sobreexplotado y otra vez reparado transporte público.

También aluden a la “falta” de libre afiliación sindical o política, la limitación de acceso a internet, la estatalidad de los medios de prensa y la retención de la libre salida de ciudadanos cubanos al exterior (y ponen como uno de los ejemplos a profesionales de diferentes sectores, principalmente de la salud).

No deseo olvidar que a Cuba la han incluido en la lista de países patrocinadores del terrorismo por apoyar, aunque sea moralmente, la independencia de otros pueblos y exponer, en público, que su camino de construcción no va alineado con los dictados emitidos desde Washington.
Puede que se me quede alguno más, aunque no dejaré afuera el más esgrimido de todos: la permanencia de Fidel Castro en la presidencia por 30 años y la sucesión de su hermano Raúl Castro Ruz.
Intentaré ir por paso, seguro me tomaré varias entradas para referirme a tales críticas, las cuales intentaré agrupar por tópicos, quizás a algunos ayude; de seguro que a otros enfurezca por desmoronarles el negocio.
Cinco décadas coexistiendo con un bloqueo, al cual amablemente lo desean bruñir con la palabra “embargo”, lo cual pone en todo este tiempo a la luz pública la matriz de los intereses imperiales y su cohorte: el bloqueo está dirigido a despojar a Cuba de toda posibilidad de comercialización de sus productos con mercados internacionales o impedir la adquisición de materias primas para su economía; así como sabotear toda inversión dentro del país o financiación de productos o tecnología con capitales extranjeros.
Entre algunos ejemplos se pueden citar a las compañías HITACHI y TOSHIBA que deniegan venta de productos a Cuba por determinaciones expuestas en las leyes norteamericanas que promueven el bloqueo. En el 2008, la Empresa canadiense SENSIENT FLAVORS dejó de suministrarle materia prima a Cuba por orientación de su casa matriz radicada en Indianápolis (EE.UU); de igual manera optó la Empresa SETHNESS PRODUCT COMPANY por cumplir con orientaciones desde Chicago.
La compañía SIEMENS, radicada en Dinamarca, se negó a suministrar equipamiento a la fábrica de cemento de Santiago de Cuba por tener que cumplir con las leyes del bloqueo. Incluso, en otra ocasión, en el intento de compra de un transformador de 125 MVA, esta empresa respondió: “No podemos vender a Cuba, pues a pesar de ser una empresa alemana sigue algunas reglas norteamericanas”.

La Compañía General Cable Inc. comunicó que no podía establecer relaciones comerciales con Cuba por “las leyes internacionales establecidas por el Departamento de Estado de EE.UU”.

Muchas otras empresas cubanas, de los diferentes sectores de la economía nacional, se han visto afectadas en la adquisición de equipamientos o materias primas. La industria azucarera no ha estado exenta, cuando en realidad fue una de las primeras en sufrir los embates del bloqueo; principalmente para la compra de piezas de repuesto o lubricantes y grasas que garantizan la producción de azúcar y derivados. La compra de camiones, remolques, neumáticos, accesorios, entre otros, también son de difícil adquisición por trabas y obstáculos de las leyes norteamericanas.
España no escapa a ser instrumento de la política de Estados Unidos. En el 2009, la Empresa ALCOA-España rechazó la compra por Cuba de perfiles de aluminio, alegando: “En respuesta a su petición de información sobre suministro de aluminio, hemos de informarle que, como empresa con sede social en Estados Unidos, no nos está permitido atender su petición debido a las actuales restricciones existentes que afectan al comercio con Cuba”.
Igualmente, el bloqueo ha sido un instrumento de extraterritorialidad para congelar e ilegalmente disponer de cuentas cubanas en el extranjero; así como emitir sanciones a entidades bancarias de otros países por el hecho de tener relaciones comerciales con Cuba.
Ejemplo de esto último lo ha sufrido el sector bancario de la Isla, al cual le han cancelado las claves BKE para la autenticación de mensajes SWIFT, donde bancos de Europa, Canadá y del área de Latinoamérica aplicaron tal medida contra Cuba por cumplir con la extraterritorialidad del bloqueo norteamericano.
En el Chase Manhattan Bank, Estados Unidos, se encontraban congelados millones de dólares pertenecientes a la compañía cubana de comunicaciones; pero estos fondos fueron saqueados descaradamente para pagar demandas de oportunistas realizadas en ese país. De ello se tiene el pago millonario a favor de la familia de los pilotos de la organización terrorista radicada en suelo norteamericano, derribados por reiteradas violaciones al espacio aéreo cubano en sus actos de provocaciones e incitación, amparados por las autoridades norteamericanas en el intento de pasar como neófitas del asunto.
Las disposiciones extraterritoriales del bloqueo también afectaron a la Oficina Cubana de la Propiedad Industrial (OCPI), a la cual se le obstaculizaron pagares por patentes internacionales a través de bancos suizos: CREDICT SUISSE BANK y UBS.
El turismo no escapa a las presiones del bloqueo, ya que no sólo se impiden los viajes de norteamericanos, cubanos o cubanoamericanos entre ambos países; sino que la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos de América (OFAC), ha prohibido a GDS SABRE la prestación de servicios de distribución de reservas a instalaciones hoteleras cubanas administradas por cadenas extranjeras.
Sobre las penalidades aplicadas a empresas extranjeras por comercializar de alguna manera con Cuba, podemos poner algunos ejemplos. Entre éstas se encuentra la Empresa LACTALIS USA, filial de la gigante francesa, con una multa por la OFAC de $ 20 mil 950 dólares. También la subsidiaria de la compañía China Minmetals, Minxia Non-Ferrous Metal Inc., la cual multaron con $1 millón 198 dólares; la Compañía Varel Holdings con 110 mil dólares por exportar tecnologías a Cuba; la Empresa EFEX Trade LLC con 2 mil dólares; la empresa Platte River Associates de Boulder, Colorado, la cual se le acusó de “comerciar con el enemigo” por suministrar un software técnico especializado, el cual fue utilizado para crear modelos sobre explotación y desarrollo potencial de petróleo y gas en aguas territoriales cubanas.
Otros muchos ejemplos pueden ser citados. ¿Con cuál derecho se asiste el gobierno norteamericano para aplicar tal política de sanciones contra Cuba y otros países, sabiendo de la flagrante violación que comete sobre los derechos de otros pueblos? ¿Por qué los monopolios silencian o mienten con irrespeto sobre los efectos devastadores del bloqueo norteamericano sobre la vida y desarrollo económicos y los derechos del pueblo cubano?
Si se contabilizaran las pérdidas a la economía cubana por la aplicación del bloqueo, se alcanzaría la cifra de los 236 mil 221 millones de dólares; sin en esto incluir las cifras por daños directos o indirectos ocasionados a objetivos económicos y sociales de la Isla por los sabotajes y actos terroristas amparados, financiados, organizados desde territorio de los Estados Unidos y con el pleno conocimiento de las autoridades de ese país.
Pero lo más evidente es que hay un dato que se ha querido subvalorar por todo el fardo mencionado en el primer párrafo, en un intento “inadvertido”, pero el cual resuena en el zócalo imperialista y no es reparado, desafortunadamente por o-misión, por muchos ceñidos a la propaganda anticubana:
¡SON 53 AÑOS DE REVOLUCIÓN!
Cuba, en todos estos años, sufriendo constantes ataque terroristas con daños a sus objetivos económicos, el robo de sus fondos en el exterior y con el sabotaje a la comercialización para evitar el desarrollo de su economía, cabe hacerse preguntas bien sencillas.
¿Cómo es posible que Cuba sin la tan polemizada ayuda de la exURSS y con una economía bajo constante sabotaje, no haya necesitado correr al FMI, al BM o se plegara a las demandas del imperio?
¿Cómo es posible que aun subsista esta “fracasada” sociedad socialista y pueda seguir llevando a cabo ayuda humanitaria y solidaria a otros confines?
De seguro que si a Cuba le devolvieran los $975, 000, 000, 000 de dólares ocasionados en pérdidas por el bloqueo y no se aplicaran políticas genocidas contra la Isla, Cuba estaría igualada o muy por delante del llamado “Primer Mundo”, dando mucho más el ejemplo que hoy en día expone: otro mundo sí es posible.
Acto en 23 y 12 por la  proclamación del carácter socialista de la Revolución cubana _Foto Roberto Suárez
Ese es el mayor miedo del imperio y lo que lo hace en persistir en el mantenimiento y recrudecimiento del genocida bloqueo.

Pero el imperio sólo cree en la práctica de políticas de engaño y cumplimentar intereses de rapiña. Además, se quedarían sin sus gatuperios para atacar a la Revolución por sus reconocidas conquistas; por tanto, para los monopolios les es más beneficioso y lucrativo darle créditos a quienes se inventan guerras en nombre de la “democracia”, invaden otros pueblos por los “derechos humanos”, diseminan bases militares por todo el planeta para la “lucha” contra el tráfico de drogas o el terrorismo; los mismos que apoyaron y validaron contra Cuba  la Operación Mangosta, la Operación Peter Pan, la Operación Pluto, Radio y TV Martí o a quienes crearon a Alpha 66, FNCA, CORU, Omega 7 y demás organizaciones paramilitares y terroristas con base en EUA.
Me parece que más valdría cuestionar el por qué países industrializados del “Primer Mundo”, como Alemania, España, Francia, Italia, Inglaterra o Estados Unidos (siendo este último el promotor del declive económico) vivan al borde del colapso por la crisis económica. ¿No lo creen?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...