Desde esta mañana estaba enfrascado en la solución de un problema eléctrico que sufre el edificio donde vivo, construido a principios de los años 60 del siglo pasado y sin beneficiarse en todos estos años con los "beneplácitos" del desarrollo capitalista del primer mundo, al cual "pertenece" España; cuando sorpresivamente me llega la noticia de que nuestros héroes (Ramón, Antonio y Gerardo) llegarán a casa, liberados, después de 16 años de injusta encarcelación, por la simple culpa de defender la integridad, la soberanía e independencia de Cuba y su pueblo, de haber infiltrado a organizaciones terroristas en suelo estadounidense y frenar diversos complots de atentados y agresiones contra Cuba; de evitar actos de terrorismo amparados por los gobiernos de Estados Unidos, el país que se auto proclama luchar, precisamente contra el terrorismo.
La alegría de la noticia nubló por completo todas mis preocupaciones sobre la falta de electricidad en casa y el edificio; solamente en mis ojos se reflejaron de un sólo golpe todas las emociones posibles de los familiares y amigos cercanos de nuestros tres héroes. Incluso de las palabras de Mirta, la madre de Antonio, la cual dio a conocer que su mayor deseo era ver a su hijo libre antes que su vida se apagara para siempre. Creo que su corazón debió haber rejuvenecido una vida entera al saber la noticia que tendrá nuevamente a su hijo en casa_ donde debió estar hace ya 16 años atrás.
Los miembros del Movimiento de Solidaridad con Cuba en Cataluña y los cubanos miembros de la FACRE, no hemos parado de pasarnos mensajes de alegrías, de júbilo, de celebración por saber que nuestros compañeros, nuestros héroes llegan finalmente a casa.
Los reclamos desde todas partes del mundo, el esfuerzo de miles de miles de compañeros desde diversos países y la entrega de muchísimos cubanos buenos residentes en el exterior, junto a los ininmaginables esfuerzos llevados a cabo por el gobierno de Cuba, han dado fruto, finalmente.
La noticia extendida por el General de Ejército Raúl Castro sobre la liberación de Antonio, Gerardo y Ramón no es producto de un gesto humanitario de Barack Obama o el gobierno de Estados Unidos; sino que ha sido la declinación del imperialismo yanqui frente al reclamo mundial y la firme hombría de nuestros héroes. La dignidad humana está hoy por encima de la barbarie imperialista.
La conducta belicista, criminal, injerencista y hegemónica del imperialismo norteamericano no encuentra cobijo en los pueblos del mundo. La firmeza de principios y la lucha en defensa de la humanidad llevada a cabo por Cuba y sus patriotas, en todos estos años de Revolución Socialista, es bandera de lucha por lograr alcanzar un mundo mejor: más equitativo, basado en el respeto mutuo y la solidaridad desinteresada.
Nuestros héroes han hecho, una vez más, historia.
Bienvenidos a casa: Ramón, Gerardo y Antonio.
Un abrazo fraternal.
¡Patria o Muerte! ¡Venceremos!
Gustavo de la Torre Morales
Palabras de Raúl Castro, anunciando el regreso de nuestros hermanos:
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