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sábado, 15 de enero de 2011

Las chapuzas que se cometen por miedo a la verdad.

Los monopolios mediáticos del capitalismo, movido por hilos de intereses imperiales, siempre han manipulado la realidad cubana sobre el acceso a internet y la “libertad de expresión”.

En el primer caso no hablan de las barreras tecnológicas que se le imponen a la Isla, al obligar a Cuba a conectarse de manera satelital (mucho más costoso para el ancho de banda que se le permite usar); así como de las prohibiciones a la que está sometida (no permitiéndosele determinados tipos de descargas o uso de software). Todo como partes inseparables de la política de bloqueo aplicada por más de 50 años.

El segundo caso, dando por todas las vías posibles a entender que los medios y canales informativos cubanos están “regulados” por una política gubernamental rígida y “dictatorial”. Sin embargo, el imperialismo sólo se atreve a llamar periodismo “libre de expresarse” a la constante tergiversación y palabrería cargada de odio que escupen sus títeres disidentes de la Isla, quienes condicionan su “libertad de expresión” a los dictados orientativos que les llega desde la misma SINA (Oficina de Intereses de los Estados Unidos en La Habana) y en pago de los míseros agasajos que les entregan por contrato.

De esta manera seguirían controlando, indirectamente dirigiendo y manipuladamente orientando la manera de pensar del público que accede a los mismos.

Pero tanta maniobra y derroche de prepotencia no se cierne solamente a la diaria desinformación de la realidad cubana y a perpetuar el férreo bloqueo económico, comercial y financiero; sino que utilizan cuanto descaro dispongan a su alcance para impedir que la verdad llegue a más partes del mundo, son las chapuzas que se cometen por miedo a la verdad.

Google, corporación cuyo producto principal es un motor de búsqueda con el mismo nombre, compró en octubre de 2006 la famosa página de vídeos YouTube por la cifra de 1 650 millones de dólares. Dicha página, muy cuestionada por las publicaciones que diversos tipos de usuarios cuelgan en la misma, hoy se quiere erigir como cumplidora de la ética publicitaria al cancelar la cuenta que poseía el portal CubaDebate (portal informativo cubano que contrarresta la tozuda campaña de difamación que hay contra la Isla) en dicha página y que ya contaba con más de 1,6 millones de descargas, desde su apertura en el 2007. Los motivos para tal parcialidad se debieron al supuesto reclamo del autor de un vídeo realizado al confeso terrorista Luis Posada Carriles, en el cual confesaba que cobraría por los servicios de sus atentados contra Cuba para sufragar sus actuales gastos ocasionados por el proceso legal que atraviesa.

Dicho sea de paso, no se le juzga por su lista de crímenes y atentados, sino por simplemente haber mentido a inmigración y autoridades norteamericanas sobre su entrada en los Estados Unidos. ¡Risorio! ¿Verdad?

A pesar de que la noticia del cierre de la cuenta a Cubadebate por YouTube ha provocado un arduo rechazo en la comunidad internacional y amigos de Cuba, que comenzaron a crear espacios por Facebook para reclamar la reapertura de la cuenta, también recibieron de Facebook una respuesta de censura, cerrando arbitrariamente la página abierta por internautas amigos de Cuba que reclamaban la restitución del canal de CubaDebate en la red de vídeos de YouTube.



Indistintamente que el slogan usado por Google es “Don´t be evil” (No seas malo), su comportamiento ha sido un sello contradictorio a lo que pregonan; por lo tanto, en realidad debería usar el lema “I only support to evilness” (Sólo apoyo a la maldad).

¡NO MÁS CENSURA EN YOUTUBE!
¡RESTABLEZCAN A CUBADEBATE!

¡NO MÁS CENSURA EN FACEBOOK!
¡RESTABLEZCAN LA PÁGINA DE SOLIDARIDAD CON CUBADEBATE!



1 comentario:

  1. Me sumo a este llamado. De Google y de Facebook te puedes esperar cosas así. Es más, sospecho que intereses sionistas han tenido mucho que ver con esta situación.

    La libertad para expresarse choca de frente con el insaciable ánimo de lucro que hay detrás de tanta simpatía aparente y tanto deseo de que nos conozcamos mejor los unos a los otros.

    Lo que hay que hacer es utilizar buscadores distintos de Google, webs de videos diferentes de Youtube y desconfiar aún más, si cabe, de las redes sociales. Éstas concretamente tienen como uno de sus objetivos prioritarios desplazar la importancia que antes tenían los blogs, especialmente los contrainformativos.

    Menos mal que aún podemos visitar la web de Cubadebate directamente. Esto es mejor que nada. Pero hay que seguir denunciando las injusticias cometidas en el ciberespacio.

    Cordiales saludos, Gustavo. ¡Cuba va! ¡Cuba vencerá!

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