sábado, 2 de enero de 2021

Preguntaron sobre el 1 de enero

 

Por Gustavo de la Torre Morales

La humanidad rige muchos de sus procesos por fechas, por el significado que han tenido para diversas generaciones, por lo que éstas revelan.

En la mayoría de los casos señalan las coordenadas de relevantes procesos, eventos o incidentes acontecidos en el ámbito social, sean por su carácter filosófico, cultural, político, económico, histórico, etcétera.

A la humanidad le gusta medirse a través de los acontecimientos que le antecedieron, le acontecen o traza para alcanzar objetivos en un determinado futuro. Por lo general, toda sociedad busca que lo que le adviene sea para mejorar, para marcar pautas de desarrollo, para avanzar.

Recientemente, por las redes, alguien lanzó la pregunta del día, deseando saber lo que podría significar el 1 de enero y no sólo porque marque el primer día de un año.

Por supuesto, son muchas las efemérides para este día. A modo de ejemplos, se puede mencionar:

  • El 1 de enero de 1867, el escritor e ingeniero sueco, Alfred Bernhard Nobel, crea la dinamita a nivel industrial. El mismo que dispuso en su testamento una parte de su fortuna para premiar a los mejores exponentes en la Literatura, Fisiología o Medicina, Física y Química; aunque también sobre temas de Paz, muy a pesar que resulta muy curioso este último detalle para quien hizo fortuna en gran parte en la fabricación a gran escala de cañones y armamentos para la guerra.
  • El 1 de enero de 1919, se fundó el Partido Comunista de Alemania (SPK por sus siglas en alemán), por la Liga Espartaquista y los  Comunistas Internacionales de Alemania (IKD), siendo dirigido por Rosa Luxemburgo y Karl Liebknecht; aunque poco después los socialdemócratas, aliados con ultraderechistas y elementos del anterior ejército imperial, detuvieron, torturaron y asesinaron a Rosa y a Karl.
  • El 1 de enero de 1993, después de 74 años de historia, la República de Checoslovaquia, forjada en el Tratado de Versalles en 1919 y que había acumulado un alto desarrollo industrial y agrícola en su período de socialismo, se dividía en los estados de Eslovaquia y República Checa, en lo que denominaron el Divorcio de Terciopelo, asumiendo ambos países la nueva economía neoliberal del capitalismo.
  • El 1 de enero de 2003, Brasil entró en la etapa de reconocimiento social a las masas olvidadas, en el asalto a los derechos para los marginados, en la integración latinoamericana, en lucha contra las desigualdades y la defensa del ambiente. Este día llegó al poder presidencial del país Luis Inácio Lula da Silva, quien lamentablemente, años después de liberar a Brasil del hambre y convertir al país en la 7ma potencia económica del mundo, fue derrocado tras una componenda imperialista con la derecha nacional y usar con treta el poder judicial.

Por supuesto, para un cubano como yo, estos sucesos mencionados anteriormente son relevantes para poder situar dichos acontecimientos en sus reales contextos, donde muchos de ellos junto a otros que le sucedieron anterior o posteriormente y guardan estrecha o relativa relación, son base fundamental para la lucha de clase en la conquista del poder por el proletariado; pero, indudablemente, lo que deseo resaltar el la estrecha relación que tiene la fecha con mi tierra natal: Cuba.

Hay dos efemérides que sientan pautas de gran significado.

La primera es la relativa al acto mezquino y vil de la corona española, que después de ver derrotada su hueste por un ejército de campesinos criollos casi harapientos, en 1899 hizo entrega oficial de Cuba a los Estados Unidos, sumiendo al archipiélago en un período de gobiernos de turnos entreguistas y, muchos de ellos en contubernio con criminales y mafiosos.

La segunda, y más importante, es referente a la derrota del dictador Fulgencio Batista (quien huyo cual cobarde, llevándose una cuantiosa suma de los fondos de Cuba) por un ejército rebelde y popular, dirigido por Fidel Castro, que a partir del 1 de enero de 1959, le dio un nuevo horizonte al país.

Por tanto, haré referencia al significado que tiene para mí el 1 de enero, pero de 1959 en Cuba. Este día significa que el pueblo cubano derrocó a una cruel dictadura, salvaje, que había llegado al poder por medio del golpe de Estado, la cual se había rodeado de esbirros, torturadores y asesinos; que la esperanza que arrojaba la independencia le fue robada a Cuba y, finalmente, después de grandes batallas, se cristalizó desde la sierra Maestra en soberanía, independencia y libertad verdaderas; que el pueblo cubano comenzó a ser el constructor de su propio camino, sin tener que ceder a chantajes ni presiones, o pedir permiso; que el mundo vio que en un pequeño archipiélago del Caribe no cabe el miedo, muy a pesar de estar frente al mismísimo poderoso imperialismo de EUA; que a partir de ese día llegó la alegría a millones de mujeres, hombres e infantes que vivían bajo la pobreza y la segregación, pero con la Revolución pasaron a ser dueños de su país y a ser tratados como humanos con plenos derechos; que ese día marcó la llegada de los derechos del campesino, del obrero, de las mujeres; que sin discriminación alguna, todos tuvieron pleno acceso a la cultura, la educación, los servicios sanitarios, la vivienda, al trabajo, al debate diáfano, a la toma de decisiones; que la enseñanza y la cultura son pilares fundamentales para la emancipación; que fue el comienzo de un necesario despliegue de solidaridad y humanismo desde el pueblo cubano hacia el mundo entero, enviando brigadas de maestros y sanitarios a rincones inhóspitos del planeta, llegando a más de 164 países: dando cultura y salvando vidas. Y referente a esto último, las Brigadas Médicas Henry Reeve si se merecen con creces el Nobel de la Paz.

Si resumo, sólo podría decir que siento un gran honor de haber nacido en un país con una rica cultura mambisa, rebelde, martiana, fidelista; en una Revolución socialista levantada con gran sacrificio y heroísmo por diversas generaciones del pueblo cubano, el cual tiene tanta dignidad, que se alza como una Palma Real y su moral se divisa, ondeando, con la estrella solitaria de nuestra insignia nacional.

Y esto, desafortunadamente para el imperialismo y los mercenarios a su servicio, no podrán mancillarlo con sus componendas mediáticas, agresiones o bloqueo económico.

Por eso me sumo a las palabras del actual presidente Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez, quien expresó en su cuenta de twitter este 31 de diciembre pasado: “El abrazo agradecido a nuestro pueblo. La gratitud y el abrazo sentido a la familia cubana, por ser inspiración, por su comprensión, participación y aporte. En familia celebremos el nuevo año y el 62 aniversario de la Revolución. Viva, Cuba Viva.”



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