Tomado de Cubainformación.
Basado en un texto de Vincenzo Basile (1)
José Manzaneda, coordinador de Cubainformación.- El pasado 22 de mayo el Gobierno de Cuba presentaba su informe ante el Comité contra la Tortura de Naciones Unidas (2).
Grandes medios internacionales convertían esta comparecencia, una obligación periódica de todo estado firmante de la Convención contra la Tortura, en una supuesta “condena” de Naciones Unidas a Cuba.
El citado Comité contra la Tortura, como en cualquiera de sus interpelaciones a otros gobiernos, realizó consultas al representante del Gobierno cubano acerca del sistema judicial y penitenciario de la Isla, sobre el trato policial a personas detenidas y preguntó sobre algunos casos concretos. El intercambio en absoluto fue un juicio a la situación en Cuba, y mucho menos una condena.
Sin embargo, varios medios repetían un mismo titular: “La ONU pide a Cuba que aclare 2.400 detenciones en 2012” (3). “El Nuevo Herald” de Miami titulaba “Panel de la ONU lanza fuerte crítica al régimen cubano” (4), “La Voz de América” decía que “La ONU pide cuenta a Cuba por represión” (5), y el diario colombiano “El Mundo” encabezaba su noticia con el titular “Cuba, a examen por tortura” (6).
Haciendo una simple consulta en la web del citado Comité contra la Tortura acerca de las menciones a Estados Unidos, leemos notas como las siguientes: “Relator Especial sobre Tortura expresa su preocupación por las restricciones impuestas por los EEUU en su interacción con los detenidos” (7), “Preocupación del Relator por prisión de Guantánamo” (8), “Denuncia de falta de prevención de la violencia contra la mujer (en EEUU)” (9), “Experto en prostitución infantil investiga en EEUU” (10), o “Urgencia para que EEUU y Somalia ratifiquen la Convención sobre los Derechos del Niño” (11).
Ningún gran medio internacional ha convertido en noticia alguna de estas notas, indicando, por ejemplo, que la ONU interpela al gobierno norteamericano por sus violaciones a los derechos humanos.
Por otro lado, los mismos medios que han inventado una condena a Cuba -que no ha existido- por parte del Comité contra la Tortura, han censurado cada una de las declaraciones favorables al Gobierno cubano –estas sí reales y probadas- por parte de otros representantes de Naciones Unidas. Repasemos algunas recientes: Elías Carranza, director del Instituto Latinoamericano de las Naciones Unidas para la Prevención del Delito, afirmaba hace unos días que Cuba es el país más seguro de la región, sin los graves problemas de violencia, criminalidad y exclusión social de sus países vecinos (12); el último informe de UNICEF confirma, un año más, que Cuba es el único país de América Latina sin desnutrición infantil (13); el representante de la FAO Marcio Porto calificaba a Cuba como modelo para el mundo por sus programas de agricultura urbana (14); y la coordinadora de la ONU en Cuba, Bárbara Pesce-Monteiro, elogiaba el sistema cubano de protección contra desastres naturales, a la vez que anunciaba su interés de replicarlo en otros países (15). Pero ninguno de estos reconocimientos a diferentes logros de la Isla en materia de protección de derechos ha sido noticia.
También en mayo, el Gobierno de EEUU presentaba su Informe anual sobre Derechos Humanos en el mundo, en el que reiteraba sus conocidas graves acusaciones contra Cuba y otros países, reproducidas a su vez por los medios internacionales (16). Curiosamente, un informe redactado por un Gobierno que practica el terror de estado, mantiene fuerzas militares y paramilitares, centros de tortura y cárceles secretas en numerosos países del mundo, que aplica de manera continua la pena de muerte, y que tiene la mayor cifra de presos del mundo, más de 2,3 millones de personas (17). ¿Algún medio llevará a titulares semejante paradoja?
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