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| Momento en que el desempleado se inmola. Foto: Internet |
Tomado de Juventud Rebelde.
MADRID, febrero 14.— Una ola de suicidios sacude esta semana a Europa
en medio de la crisis económica, con casos de personas que se quitaron
la vida de diversas formas en España, Francia e Italia.
En tierras galas un hombre se incendió en la provincia de Nantes
luego de recibir un rechazo de subsidio por desempleo, necesario para
poder continuar con acceso a comida.
«Este es mi gran día. Voy a prenderme fuego frente a la Oficina de
Puestos de Trabajo», anunció el hombre minutos antes de suicidarse.
«He trabajado 720 horas y para la ley sólo hacen falta 610, pero mi petición fue rechazada», dijo antes de arder mortalmente.
Cuando llegaron las unidades de socorro el fuego era imposible de
controlar y el hombre murió en minutos, en la esquina del
estacionamiento de la oficina de empleos.
«Es una tragedia terrible», dijo El ministro francés de Trabajo,
Michel Sapin, calificó el hecho como una tragedia terrible, mientras el
primer ministro, Jean-Marc Ayrault, expresó su emoción por lo que llamó
«un drama humano».
En España, la cifra de suicidios por desalojo se elevó a cuatro este
jueves cuando un hombre de 55 años se ahorcó en su departamento de
Alicante.
Cuando miembros de la fatídica comisión del servicio común de
Notificaciones y Embargos llegó a la vivienda situada en el número 25 de
la calle Poeta Sansano de Alicante para ejecutar el desahucio, tras
llamar insistentemente y no tener respuesta, sospecharon lo peor.
Algunas ONG de la nación ibérica especulan con que el número de
muertos por esta crisis es aún mayor, porque no todas llegan a ganar
notoriedad y quedan en la anónima cotidianeidad del barrio.
Entonces forzaron la entrada y encontraron al inquilino, oriundo de
Barcelona y que vivía sólo, ahorcado en una de las habitaciones. «Lo
había dicho, si lo desalojaban se iba a matar y lo hizo», dijo un
vecino.
«Estos suicidios están ligados a la crisis y a una falta de
responsabilidad por parte del Gobierno y de las Administraciones
regionales. No se están tomando las medidas necesarias para que la
situación económica no repercuta siempre sobre quienes menos tienen»,
denunció un vocero de Plataforma Stop Desahucios.
«En un reciente congreso de psiquiatría se especificó que actualmente
puede haber en España unos nueve suicidios diarios relacionados con la
crisis económica y no se están tomando las medidas adecuadas. Hemos
movilizado, 1,4 millones de firmas y el Partido Popular ha estado a
punto de ni siquiera debatir las propuestas que venían recogidas en
ellas», indicó el portavoz de la plataforma.
Este es el cuarto suicidio en apenas seis días que se registra en
España, donde los desalojos de moradas se han convertido en la cara más
dramática de la crisis económica.
Un hombre se suicidó el pasado viernes en la sureña ciudad andaluza
de Córdoba, luego de ser notificado por Hacienda de que tenía una
abultada deuda con el banco al cual había entregado su casa ante la
imposibilidad de pagar la hipoteca, recordó PL.
Francisco J. Lema, de 36 años y activista de la plataforma Stop
Desahucios, se lanzó al vacío desde un cuarto piso después de recibir
una comunicación sobre una deuda de 22 mil euros por los trámites
originados tras entregar su piso a cambio de la cancelación de la deuda.
Un matrimonio de jubilados adoptó la víspera una decisión similar en
la isla balear de Mallorca, al recibir un aviso de que serían expulsados
de su hogar por impago del préstamo concedido por una entidad
financiera.
La muerte se produjo horas antes de que el Congreso de los Diputados
accediera a tramitar una iniciativa legislativa popular, que solicita
poner fin a los desahucios de viviendas y aplicar la dación en pago como
mecanismo para saldar la deuda hipotecaria.
La ley hipotecaria española no contempla de forma general que la
entrega del inmueble —lo que se conoce como dación en pago— sea
suficiente para liquidar el débito adquirido con el banco, con lo cual
los afectados están obligados a continuar abonando su crédito.
Otro intento
Y un joven marfileño de 19 años de edad se prendió fuego este jueves
en la salida de la Terminal 3 del aeropuerto internacional italiano de
Fiumicino, ubicado en Roma.
El hombre, en estado grave, se encuentra ingresado en código rojo en
la unidad de quemados del hospital San Eugenio de Roma, luego de que un
policía lograra apagar las llamas con un extintor de incendios, explicó
PL.
La terminal del aeropuerto, cuyo nombre oficial es Leonardo da Vinci,
quedó parcialmente dañada por el fuego, mientras el agente que salvó al
marfileño resultó herido.
El joven, con una orden de deportación por permanecer indocumentado
en Italia, tenía que presentarse esta mañana en las oficinas de la
policía de fronteras para la aplicación de la medida.
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