Tomado del blog Capítulo Cubano.
Por Vincenzo Basile
Desde que pasó el huracán Sandy por las
provincias orientales de la Isla,
la llamada bloguera independiente, Yoani Sánchez, ha hecho varios llamados a la
cooperación nacional y a poner a un lado las diferencias. Pero, como se trata
de una oportunista incurable, esa supuesta tregua
ha sido violada por la misma proponente, quien, unas horas después del paso del
terrible huracán, ha empezado un largo, y todavía vigente, espectáculo especulativo protagonizado por colera, dengue, hambre, asaltos, falta de
agua, miedo y ausencia institucional.
En ese clima de profunda incertidumbre, ha
llegado la respuesta a todos esos problemas: ella tiene la solución. En ese
sentido ha publicado sus tragicómicas propuestas para ayudar a las poblaciones
afectadas por Sandy. Ignorando las ayudas materiales (y las manifestaciones de
solidaridad) que están llegando desde muchos países como Rusia, Venezuela o
Bolivia, parece que según la bloguera la solución debería ser otra, es decir que
el gobierno cubano renuncie prácticamente a su soberanía territorial, solicitando a llamadas organizaciones ‘independientes’
(de no bien identificados países) entrar en territorio cubano y ejercer sin
control una supuesta actividad de evaluación y recuperación, quizás más o menos
lo que ha ocurrido, y sigue ocurriendo, en Haití
tras el terremoto de 2010.
Pero, lo que más asombra de todas las interesantes propuestas de Yoani
Sánchez, es que -una vez más- el gran
ausente de sus panfletos es bloqueo
norteamericano contra Cuba. Es decir, ella pide al gobierno cubano que facilite
la entrada de materiales, alimentos y dinero (desde el llamado exilio), pero absurdamente no menciona
lo que de hecho impide esa entrada a nivel nacional y macroeconómico, el
bloqueo de Estados Unidos.
No se pretende que de repente la bloguera se
convierta en una asidua defensora de la Revolución, por supuesto. Sólo, en el respeto de su
llamado a la cooperación y de una supuesta ética periódistica que cada día le
falta siempre más, debería por lo menos admitir lo que es una evidencia
objetiva e irrefutable: las sanciones económicas impuestas contra Cuba, de
hecho, limitarán su capacidad de recuperación.
Sin el bloqueo, Cuba podría acceder al
crédito internacional, podría comprar materiales de construcción de empresas
norteamericanas, podría reemplazar las equipos médicos dañados por el paso de
Sandy, podría recuperar pérdidas económicas de millones de dólares e invertir
en la reconstrucción de las ciudades destruidas, entre otras cosas, lo que
ahora resulta imposible por la vigencia anacrónica de dicho bloqueo.
Claro está que, en ese caso, el gobierno
cubano lograría solucionar más rápidamente las afectaciones de las provincias
orientales, algo que finalmente provocaría la pérdida del pretexto que la
bloguera usará por mucho tiempo para seguir especulando y manipulando.
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