Por JM Álvarez
El juzgado de
instrucción número 6 de Ceuta ha imputado a 16 guardias civiles
implicados en los sucesos de la playa del Tarajal ocurridos el 6 de
febrero de 2014, donde murieron al menos 15 inmigrantes cuando trataban
de entrar a nado desde Marruecos a Ceuta. Durante los hechos, varios
agentes dispararon balas de goma y botes de humo dicen que para
"disuadirles".
La historia según testigos oculares y supervivientes:
"La Guardia Civil al
principio disparaba al aire pero cuando empezaron a llegar al área
española tiraron a los cuerpos de las personas que se encontraban en el
agua, apuntaban a los flotadores y éstos se pinchaban” (...) "Muchas de
las balas de caucho alcanzaron partes vitales de los cuerpos, sobre todo
la cabeza y la cara”.
"Los guardias civiles
que se encontraban apostados en las piedras del espigón disparaban desde
allí a corta distancia de los inmigrantes que estaban en el agua (...).
“Los guardias civiles apostados en el espigón utilizaban las culatas de
sus armas para impedir que los inmigrantes se agarrasen a las rocas"
“Los Guardias Civiles
apostados en el espigón y la playa, las dos embarcaciones en el mar y la
torre de control, todos ellos disparando a las personas e introduciendo
gases lacrimógenos en el agua, mientras los inmigrantes estaban
bloqueados por los marroquíes de un lado y los españoles pegando de
otro”.
“Había heridos que
intentaban llegar hacia la Guardia Civil para pedir auxilio y los
agentes no se lo prestaron”. Algunos entraban en el agua para ir al lado
del barco, cuando tienes problemas en el agua, al ver el barco piensas
que si vienes hacia él va a ayudarte, va a sacarte del agua pero no era
el caso, se retiraba y te dejaba morir. Vi cómo cuatro personas querían
ir hacia el barco y empezaron a pegarles”
“Reducían con violencia a
las personas que llegaban y en dos de los casos los heridos refieren
que un agente disparó sobre sus cabezas mientras estaban tumbados sobre
la arena”.
“Había una mujer Guardia
Civil. Nos ha puesto de rodillas, nos ha pegado con la porra. Era la
única mujer que hemos visto, tendría aproximadamente unos 30 años, con
pelo más bien claro y delgada. Los golpes me han provocado daño en la
cadera e inflamación en la pierna derecha".
La reacción: "Triste noticia ¡Suerte,compañeros!" |
Si hay algo triste y despreciable es el corporativismo que cierra los ojos ante esto |
No hay comentarios:
Publicar un comentario