El Juramento que hizo Obama con sus coleguitas... símil de sus antecesores.

Primera investidura en enero de 2009. Frente al capitolio.

Segunda investidura en enero de 2013, igualmente frente al Capitolio,

la cual realizó poniendo su mano sobre dos Biblias (una usada hace 150 años por Abraham Lincoln y otra propiedad del activista afroamericano Martin Luther King Jr).

Texto original de Fidelista por Siempre, adaptado por autor de este blog:

Muchas veces nos preguntamos cómo sería de solemne la ceremonia de juramentación para la toma de posesión por parte del presidente del gobierno de Estados Unidos... un puesto que muchos estadounidenses lo estiman como un acontecimiento universalmente "privilegiado", por la "responsabilidad" que se asume, con el mismo, el gobernante de ese país frente a todas las naciones del globo terráqueo... la vía láctea y todo el matorral craneal que les siembran de nido en la cabeza la prensa norteamericana y resto de monopolios mediáticos serviles a los intereses del Tío Sam.

El Corolario rooseveltiano ha hecho mucho daño con eso de hacer creer a los norteamericanos de ser divinamente presentados como los elegidos a dar lecciones al resto del planeta… aunque habría que preguntarse ¿Ejemplo en qué?

Pero, volviendo al tema, sería mucho más curioso conocer la posterior “reunión” que se realiza entre los coleguitas de “trabajo” y dónde salen las anécdotas curiosas o graciosas de cada uno… por eso, indagando sobre el tema, se logró encontrar una única instantánea de la juerga posterior a la juramentación del cargo, donde Obama entre coleguitas repetía su “compromiso” del 2009 y que repitió en el 2013:

Prometo, sobre la Torah misma

·        No inmiscuirme en los asuntos internos de otros estados,

·        Jamás asesinar a inocentes con Drones,

·        No hacer la guerra en el mundo,

·        Llevar la igualdad a los EEUU, respetar los DDHH,

·        No espiar a nadie, no bloquear a nadie

·        Y amar al mundo como el mundo nos ama a nosotros, los únicos, los elegidos por Dio$......

¡Qué! ¿Creen ustedes que debemos descojonarnos de la risa nosotros también?