Tomado de Razones de Cuba
Por Claudia Samón
El término «estado fallido» emergió en la década de 1990 dentro del discurso político occidental, principalmente para describir gobiernos que habían perdido el control efectivo de su territorio y población o que ya no podían proporcionar servicios públicos básicos. Sin embargo, en décadas recientes, esta etiqueta ha sido estratégicamente convertida en arma a través de campañas de guerra cognitiva para socavar gobiernos soberanos que resisten la alineación con los intereses geopolíticos occidentales.