¿Qué pasa que no escucho los reclamos de los monopolios mediáticos por los derechos humanos de los indignados de DRY?

Concentración en la Puerta del Sol, Madrid, España

Si un grillo chilla en Cuba, todos los corresponsales del grupo PRISA, junto a los demás medios españoles y europeos radicados en la Isla y toda la comparsa contratada por el imperio (los disidentes) publican una avalancha de epítetos contra la Revolución.

Ahora, si se trata de la recogida de las llamadas “Damas de Blanco” por parte de miembros del MININT o la custodia de la policía a estas señoras del amo cuando ejecutan su pasarela monitoreada por funcionarios de embajadas europeas; entonces los medios dicen que en Cuba no se respetan los derechos humanos y adosan que el operativo policial fue “salvaje”, “brutal”, aunque las damiselas no hayan recibido un rasguño, ni un golpe, ni han sido arrastradas por los pelos fuera del lugar del desfile.

Pero la campaña difamatoria contra el sistema socialista de la Isla es remunerada, por no decir que obligado para seguir manteniendo el puesto. Hay que hablar mal del sistema cubano y degradarlo con difamaciones para que la opinión pública no vea un ejemplo de rebeldía reafirmarse con la participación del pueblo.

Sin embargo, desde hace sólo un par de semanas atrás, desde la Puerta del Sol, en Madrid, comenzó la llamada “Spanish Revolution” (fielmente Movimiento Democracia Real Ya). Algo que comenzó con la espontánea invitación por las redes de congregarse en un lugar que diera espacio al debate, el análisis, la diáfana discusión bajo paulatinas directrices de orden, organización, civismo y, principalmente, pacíficos encuentros de charlas y arte popular.

El motivo de esta pacífica revolución social de pronunciamiento y protesta radica en denunciar la política de recortes, privatización, ahogo de impuestos y favorecimiento de los políticos a los verdaderos provocadores de la crisis: los bancos.

El Movimiento DRY le ha dado tono sonoro a la voz de la sociedad, de los jóvenes, de los trabajadores, de aquellos que el grueso espectro de partidos políticos no han alcanzo convencer con la fanfarrea publicitaria electoral ni anteriores políticas o futuras e ilusorias promesas, de los indignados con el sistema capitalista, ya que esa voz hasta el momento no se escuchaba por estar aplastada bajo las leyes de “austeridad” del gobierno (disimuladamente aplaudidas y empujadas por los partidos de derecha).

Pero ya eran muchos días de acampadas, que va eclipsando el futuro devenir del triunfo electoral mayoritario de la derecha. Ya es hora de volver a silenciar la voz que se está expandiendo hacia otros confines del mundo.

Para taponar la garganta social, en Plaza Cataluña, Barcelona, los Mossos D´Escuadra, bajo la orden de escoltar a brigadas de limpieza, se escudaron en el pretexto de hacer limpieza sanitaria en el lugar y evitar enfrentamientos entre los acampados y la afición que se reúna en Canaletes si el equipo de fútbol del Barça ganaba la copa de Europa. Entonces, por la decisión de los acampados de mantenerse en el lugar, el cuerpo policial “amablemente” desalojaron a garrotazos a los “indignados”. No hubo piedad, no hubo conversación o cívica discusión para ejecutar la tarea_ simplemente había que dispersar por la fuerza una acampada orgánicamente bien preparada en toda disposición de sanidad y otros aspectos.

La intervención de las brigadas de limpieza se llevó a cabo con el desmontaje de las carpas y carteles de DRY y recogiendo en un camión objetos personales y ordenadores de los acampados. ¿Pero era limpieza, según dijeron? ¡Ah! Claro hasta de los amotinados.

¿Pero la sociedad catalana y española no tiene derecho a manifestar su descontento porque ignoran sus derechos elementales a una vida digna? ¿La sociedad no tiene derecho a protestar porque los políticos viran la cara después que ganan las elecciones y no cumplen promesas?

¿Dónde están los medios que reclaman por los derechos humanos de los indignados? Que por cierto, son muchos los acampados.

Esperemos que las entidades políticas de derecha española y sus medios de comunicación, la camada de disidentes cubanos excarcelados y que se trasladaron a la península ibérica, que Yoani Sánchez, Ernesto Hernández Busto, o el fardo circense (incluyendo las Damas de Blanco) contratado por la SINA en La Habana, se pronuncien por los derechos humanos de los acampados del Movimiento DRY_ aunque sabemos que para esto son como los monos sabios: ciegos, sordos y mudos.